El 17 de abril se celebra “El Día Mundial del Malbec”, fecha escogida en el 2011 por Wines Of Argentina (entidad responsable de difundir la cultura del vino argentino), convencidos de que esta celebración ayudaría a posicionar al Malbec como su carta de presentación al mundo vitivinícola. Ha sido tan exitosa la celebración que hoy en día se unen más de 60 ciudades alrededor del mundo para honrar al Malbec, no sólo de origen argentino, sino otros “nuevos” orígenes de esta uva como lo son Chile, Francia o California.

El 17 de abril conmemora la fecha en la que en 1853, el presidente argentino Domingo Faustino Sarmiento oficializó su intención de transformar la industria del vino del país. Para lograrlo, le encomendó a Michel Aimé Pouget, experto francés en suelos, la tarea de llevar a Argentina nuevos varietales de uvas nobles para mejorar sus cultivos. Entre ellas se encontraba el Malbec, originaria de la región de Cahors en Francia, la cual ingresó oficialmente al país en 1868.

Sin embargo, fue en la década de los 90 que Argentina, en especial la región de Mendoza, experimentó un aumento de plantación de vides de más de 38 mil hectáreas, extendiéndose  incluso al Valle de Río Negro en la Patagonia y de los Valles Calchaquies en Salta. Los terroirs de estas zonas son perfectos para la vid del Malbec, lo cual llevó a que se convirtió en la variedad más cultivada en el país y a que Argentina tomara el primer puesto como productor mundial de Malbec (seguido por Francia, España, Sudáfrica, y Chile).

En Argentina, en cabeza de Nicolás Catena Zapata y el Catena Institute of Wine, se han estudiado los efectos de la altitud en el MALBEC. En 1994, Nicolás Catena plantó exitosamente el primer viñedo de Malbec a 1.500 metros de altitud en Gualtallary, en el viñedo Adrianna, y desarrolló una selección de clones de Malbec Argentina. Los grandes resultados de estos estudios llegaron a varios expertos extranjeros, como Paul Hobbs, Michel Rolland, Roberto Cipresso y Alberto Antonini, quienes se interesaron por el varietal y lo posicionaron aún más a nivel mundial. Hoy, los enólogos continúan innovando y jugando con el terroir de distintas regiones para crear el mejor Malbec posible.

El vino Malbec se caracteriza por su color oscuro y por sus sabores intensos y afrutados como la ciruela, la mora y una variedad de fruta negra. En boca tiene una textura aterciopelada por sus taninos medios.  Los grandes vinos de Malbec, tienen un potencial de guarda entre 15-20 años. Ahora, conociendo los orígenes de esta celebración, no queda más que sumarnos a este día mundia y celebrarlo todo el mes con una copa y en buena compañía.

Johanna Suarez